Los tiempos cambian y con ellos las tecnologías. Actualmente es muchísimo más fácil inspeccionar una tubería, porque se cuenta con equipos avanzados que facilitan el trabajo.
Se trata de cámaras de inspección, las cuales ofrecen una supervisión visual y detallada para un diagnóstico certero en fontanería, poseería, alcantarillado, etc.
Lo mejor de contratar empresas que cuenten con estos aparatos, es que la revisión no resulta invasiva y, aunque pareciera costoso, al final ahorrarían sumas de dinero que seguramente gastarían comprando materiales para la reparación de paredes o pavimento.
Incluyen en el registro hasta las más mínimas fisuras
Las cámaras de inspección de tuberías pueden ser manuales, robotizadas o de empuje.
Las empresas dedicadas a este tipo de trabajo le indicarán cuál es el modelo que conviene usar, pues este dependerá de la emergencia que usted presente.
Algunas permiten la revisión de cañerías de diámetros reducidos, otras sirven para los espacios más amplios.
De hecho, los equipos de filmación ofrecen la posibilidad de registrar imágenes en vertical, por lo que difícilmente quedará por fuera del video alguna fisura o grieta, rotura, obstrucción sea total o parcial.
Las cámaras de inspección significan alto rendimiento
Otra de las ventajas de usar cámaras para inspeccionar cañerías, es que sin necesidad de que haya algún problema, puede evaluarse cada cierto tiempo de modo preventivo, el nivel de degradación que presenta la red.
Generalmente quienes las manejan pueden monitorear en la superficie, instalados en furgones laboratorio.
Los equipos de filmación son de alto rendimiento y plantean un chequeo controlado en tiempo real, además de la posibilidad de contar con el registro para levantar un informe detallado de la revisión.
Se suma también que el cliente no tendrá dudas sobre el problema que presenta la tubería, ya que él mismo podrá verlo.
Nos liberan de riesgos durante labores
El trabajo de supervisión resulta más cómodo tanto para el consumidor como para el operador, pues se determina con facilidad en qué punto está el problema sin tener que abrir pisos en varias partes, para adivinar la avería.
Con cámaras de inspección de tuberías, los riesgos son mínimos debido a que las personas no se someten a temperaturas extremas, sustancias tóxicas o zonas en peligro de derrumbes.
Pregunte en su compañía de confianza qué equipos de cámara ofrecen a la clientela.
Algunos equipos para revisar red de cañerías
Entre las robotizadas destaca la IPEK Rovver, una clásica con tres carros tractores en los que se configuran sistemas para inspecciones que van desde los 100 milímetros hasta los 1.200 milímetros.
También la IPEK Rovion usada en alcantarillados; es escalable desde 100 milímetros hasta 2.000 milímetros; además cuenta con zoom óptico y digital.
De las manuales, la RIDGID son las más usadas en poseería y fontanería. Posee varillas de empuje que no le restan capacidad de avance; sus monitores se configuran de acuerdo con lo que demande la inspección.
Aparatos de zoom para obras industriales
Las cámaras de zoom son ideales para trabajos industriales, pues ofrece un diagnóstico rápido ya sea para limpieza o rehabilitación. Gracias a su iluminación, permiten que los trabajos se realicen desde el pozo de registro sin que se introduzca un equipo físico para la revisión.
Se les conoce como Pértiga, porque constan de un mástil telescópico para introducir la cabeza del aparato y que esta baje a ver el pozo.
Trabajar con cámaras para examinar tuberías brinda una imagen más profesional y ubica a la empresa que las posea entre las más competitivas del mercado.
Incluso, es común que los clientes de una vez soliciten contar con los servicios de equipos de filmación, para los trabajos en las redes de agua.