Limpieza de tuberías

limpieza de tuberias

¿Le ha pasado que abre la regadera pero el agua no baja por el drenaje? ¿Cuándo lava los platos el fregadero se rebosa? Es común que suceda sino se realiza el debido mantenimiento.

La limpieza de tuberías es fundamental para su óptimo funcionamiento, tanto en viviendas como empresas.

Ocurre que su uso constante produce la acumulación de residuos, lo cual acarrearía gastos para sustituirlas, además de afecciones a la salud por los olores que desprende.

Aparte un presupuesto para las tuberías de la empresa o el hogar

Uno de los beneficios principales de la limpieza a las tuberías es que se evita la proliferación de cucarachas u otros insectos rastreros; además, no emanaría hedores ni se concentrarían gérmenes.

Recuerde que en la red quedan atascados sobras de sustancias, cabello o alimentos, si el agua no circula con suficiente fuerza.

Ya sea para el hogar o en una compañía, hay que contar con un presupuesto destinado para el saneamiento de las cañerías; si se lleva a cabo con cierta frecuencia, podría ahorrarse desembolsos cuantiosos e inesperados.

Algunos consejos para mantener limpias las tuberías

Aunque ciertamente hay especialistas en la materia, usted puede ser más previsivo.

Una de las principales recomendaciones es emplear protectores en las entradas a las tuberías; son una especie de malla, en ocasiones de metal, que se colocan en el fregadero, lavabo, ducha, etc. Su uso es excelente porque permite que baje el agua sin arrastrar partículas sólidas.

Tales rejillas se asean diariamente, volcando los restos a la basura y volviéndolas a colocar en la boca del sumidero.

Cuando se trata del fregadero, conviene retirar de los platos, sartenes u ollas, el exceso de grasa o sobrante de alimentos, antes de proceder a lavarlos, para que los desperdicios no bajen y se aglomeren en la tubería; esta es una manera de mantenerlas limpias.

Otras técnicas de limpieza

Además del cuidado que cada quien puede tener con las cañerías, no está demás contar con algunos productos comerciales, la mayoría a base de lejía.

Echar un poco por el desagüe, dos o cuatro veces al mes garantizan un aseo óptimo. Fíjese que estos no afecten el PVC con que se construyen los tubos.

El amoníaco suele ser más económico, solo hay que tener cautela al emplearlo, debido a lo fuerte de su olor y lo delicado de mezclarlo con otro químico, ya que resulta peligroso.

Vierta el amoniaco por el tubo y déjelo actuar toda la noche; como emana gases, tape el desagüe y mientras lo aplique use guantes y mascarilla.

Al día siguiente retire el tapón y vacíe un balde con agua caliente hasta que no se perciba olor a amoniaco y se evidencie que el agua circula bien.

Cuidado con lo que lance por el inodoro

Una práctica común es desechar el papel higiénico por el inodoro, incluso hay marcas fabricadas para que este se deshaga al contacto con el agua. Pero no acostumbre a botar grandes cantidades, ya que pudiera obstruir el bajante.

Pese a que hay especialistas capaces de revolver estos atascos, no es un trabajo sencillo cuando es gran volumen. Si decide no contratar un profesional, recomendamos no usar varillas para destapar la tranca; son mejores las guías metálicas porque no provocan daños y resultan flexibles.

Conociendo estos consejos, aplique el más conveniente en su caso. Si se trata de una empresa, busque servicios de expertos para que atiendan los problemas que puedan presentar sus redes de tuberías.

La mejor sugerencia es ser precavido y cuidadoso en el tema, además de actuar antes que las cañerías demanden de mayor atención y dinero.

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